(Foto)libros que revisitan y reescriben la historia de la fotografía, (foto)libros que diseccionan modos de representación e ideas erradicadas en torno al valor de la imagen, (foto)libros antagónicos, (foto)libros que añaden y (foto)libros que restan.

Esta exposición parte del lugar sagrado de la biblioteca hacía un terreno profano de apropiaciones, reciclajes y reinvenciones del (foto)libro, como un objeto en proceso: un objeto abierto a reinterpretaciones subversivas de autorías y relatos hegemónicos.

Reversiones acoge (foto)libros que revisitan grandes hitos de la fotografía, (foto)libros que se envisten con formas y bagajes ideológicos ajenos con el fin de subvertirlos y visibilizar identidades y narrativas ocultas, así como (foto)libros que se fracturan y se reversionan, desafiando su propio relato, forma y firma de autor.

Todos ellos atestiguan, como herramientas de activismo, la complicidad de las imágenes con las narrativas y las ideologías dominantes de nuestros «tiempos líquidos», al igual que sugieren la necesidad de una lectura novedosa de la historia a través del soporte de (foto)libro. Una lectura insumisa que no duda en deconstruir los axiomas y relatos de la propia fotografía.

Una exposición y a la vez laboratorio de ideas, Reversiones aspira a conducir un espacio crítico y una «biblioteca reversionada» que se entrelazará con la que acaba de nacer: la nueva colección de la biblioteca del Centro de la Imagen. A lo largo de más de tres meses, la muestra se acompañará de una serie de acciones y actividades que invitarán a sus visitantes a desafiar, reactivar y reinventar sus contenidos.