No heredamos la tierra
La pieza consiste en seis postales comerciales de la ciudad de Morelia que muestran monumentos históricos convertidos hoy en puntos turísticos. Se trata de la Fuente de Las Tarascas, el Monumento Ecuestre a José María Morelos y Pavón, en la plaza Morelos, el Acueducto de Morelia, y la Catedral de Morelia. Este políptico es un cuestionamiento a la forma en que construimos el pasado, y a cómo la presencia de monumentos ejerce cierto peso y violencia en las ciudades coloniales. En particular, me refiero a la manera en que la historia ha sido construida como proyecto de Estado, y las narraciones con la que nos es inculcada. ¿De qué forma enseñamos a dar valor a las cosas? ¿Qué se conserva y qué se destruye (en términos tanto metafóricos como literales)? Además, busca reflexionar sobre la práctica —ahora menos común— de pintar a mano fotografías en blanco y negro, y en ese sentido, me pregunto también sobre el paso del tiempo y la evolución de las técnicas de representación. Estas piezas se convierten en un modo de ensayar la apropiación de imágenes y pensar ficciones sobre nuestro pasado, con miras a entender nuestro presente y plantear mejores futuros.
Marco López Valenzuela
Cursó la licenciatura en Arte y Diseño, en la Escuela Nacional de Estudios Superiores de la UNAM, Unidad Morelia. Su trabajo ha sido expuesto individual y colectivamente a nivel nacional e internacional, y forma parte de la colección del Centro de Formación, Producción e Investigación Gráfica Museograbado, en Zacatecas. Actualmente, codirige el espacio independiente Aberrante, en Morelia, Michoacán.
Nancy Chávez